Este ejercicio de identidad partió de una repentina en la cual debía generar un sistema de identidad a partir de mis cualidades y defectos personales. En mi caso, fue un ejercicio que me ayudó a establecer distintos lazos con la abstracción y la linea. Creo que mis isotipos más afortunados fueron los que surgieron a partir de los defectos. Fue importante observar cómo me hacía sentir cada concepto para poder traducirlo visualmente.










Este ejercicio de identidad partió de una repentina en la cual debía generar un sistema de identidad a partir de mis cualidades y defectos personales. En mi caso, fue un ejercicio que me ayudó a establecer distintos lazos con la abstracción y la linea. Creo que mis isotipos más afortunados fueron los que surgieron a partir de los defectos. Fue importante observar cómo me hacía sentir cada concepto para poder traducirlo visualmente.









